Copa del Mundo Brasil 2014. Día 2.

El viernes 13, segundo día de la competición en tierras brasileñas, nos dejó tres partidos muy interesantes: el duelo que cerraba el grupo A, México-Camerún, y los dos partidos que abrían la contienda en el grupo B, el grupo de España, que debutaba ante su rival en la final de Sudáfrica, Holanda, y el Chile-Australia, con más poder trascendente del que se creía en un principio.

México 1-0 Camerún

La polémica arbitral siguió en el segundo día de la Copa del Mundo. En Natal, la selección mexicana se enfrentaba a Camerún en el segundo partido del grupo A y del mundial. Con clara superioridad, los aztecas se impusieron por un gol a cero al combinado africano, que estuvo demasiado flojo para lo que se le exige ante el que se supone que es su rival más débil en el grupo. Valió el tanto de Oribe Peralta en el minuto 61, aprovechando un rechace en el área del arquero Itandje después de un tiro algo defectuoso de Giovani.

El mencionado delantero del Villarreal no tuvo su día, la verdad. A pesar de ser el principal peligro de su selección y cuajar un buen partido, el ex del Barcelona no tendrá un gran recuerdo de su debut en la competición. En la primera parte le anularon dos goles legales por fuera de juego, uno en el 10' y otro 12 minutos después. En el primero, después de un gran centro de Herrera, Dos Santos empalmó a la red una gran volea. En el segundo, Rafa Márquez cabeceó un córner lanzado desde la izquierda, después el balón impactó en Choupo-Moting antes de que Giovani volviese a marcar. Los dos anulados. El linier estaba más pendiente de la lluvia que de otra cosa. Las protestas mexicanas eran notorias, y con razón, ya que estaban dominando el partido y seguían con el marcador a 0.

La primera parte acabó sin goles pero en la segunda la 'tri' aprovechó su oportunidad. Después de que Camerún consiguiese despertar de una vez y tener algo más la posesión del balón, el héroe de la victoria en Londres Peralta transformó el primer gol de México en la Copa del Mundo. Los africanos, sin muchas ganas y con menos fútbol, con Mbia como gran baluarte y Eto'o desaparecido, hicieron intención de plantar cara a los aztecas, pero ya era muy difícil. Eso sí, el portero Guillermo Ochoa se pudo lucir al parar un gran remate de cabeza a Moukandjo en el último minuto.

México se lleva los tres primeros puntos tras un partido bastante aceptable contra unos cameruneses que tienen pinta de ser el conejillo de indias del grupo A.

México (Peralta) 1-0 Camerún

Estadio Das Dunas, Natal



España 1-5 Holanda

La verdad es que no sé cómo empezar a escribir la crónica del debut de la Roja. En el Arena Fonte Nova se dio el viernes algo tan... ¿bochornoso? ¿patético? Creo que hay unos cuantos adjetivos que no usaré porque ya sería demasiado, pero creo que esos dos y estrepitoso definen bien la goleada de

Holanda sobre la vigente campeona del Mundo.

Holanda ayer se escribía con V de Vendetta. Porque sí, ayer hubo venganza y mucha. Las ansias que tenían los holandeses por tomarse la revancha y batir a los mismos jugadores que les impidieron levantar la Copa del Mundo aquella noche de 2010 en Sudáfrica eran más que notorias. Arjen Robben no estaba motivado, estaba con un instinto asesino que pocas veces se le ha visto. Y esa motivación les hizo ser superiores a España y conseguir darle la vuelta a un marcador adverso y a un juego de la selección que, seamos sinceros, en la primera parte fue más que aceptable.

Los fallos atrás condenaron al conjunto de Vicente Del Bosque, al que se le notó incapaz de poner remedios a los fallos de esta selección, que ayer iba de blanco y con la que caía en Salvador de Bahía se le notaron todas las vergüenzas. Los primeros minutos de la selección fueron aceptables o más que eso, como ya he dicho. Bastante verticalidad, juego por el medio campo y apertura de huecos. El once que estaba previsto fue el que el técnico salmantino sacó a la cancha, con la incorporación arriba de Silva y Costa, haciendo su debut oficial en el mundial (y siendo abucheado por la grada) éste último. El gol se veía venir, aunque Holanda ya empezaba a dar muestras de su poderío táctico con esa defensa de cinco, que parecía que era de cincuenta. Y tal gol llegó tras un penalti cometido por Costa, muy dudoso pero con contacto de Janmaat sobre el hispano-brasileño, muy picado y metido en el partido, incluso mandando callar al público después de forzar la pena máxima. Corría el minuto 27. Xabi Alonso fue el encargado de ejecutar el penalti, y no falló.

Lo siguiente era asegurar el partido, y la selección estuvo a puntito de hacerlo con una vaselina de Silva que Cillessen desvió lo justo con las dos manos. Buen partido el del portero holandés. Y como decía, estuvo a puntito de hacerlo, ya que justo antes de irnos al descanso, el lateral Blind, que hizo un auténtico partidazo en la banda, enganchó un centro medido casi desde el medio campo a la espalda de los centrales, por donde se coló el listo de Robin Van Persie. Y digo listo porque el remate que hizo lo define como tal. Una paloma parecía el delantero del United. Superó a Casillas por arriba con dicho remate. España se fue helada al descanso.

Y helada volvió. Los orange se pusieron por delante en el 53' con un gol absolutamente calcado al primero. Pase de Blind kilométrico desde su banda, control excelso de Robben entre los centrales, recorte a Piqué (su empanada ayer no tuvo nombre) y definición ante Iker con ayuda de la pierna de Ramos, que llegó 1 segundo tarde. Decisivo. A partir de ahí, la naranja volvió a ser mecánica y España fue totalmente humillada. La defensa seguía de siesta, y no defendió la falta que sirvió Sneijder desde la izquierda y que De Vrij remató sin oposición, no sin antes habiendo estorbado a Casillas su compañero Van Persie. Fue una falta clarísima, la verdad.

España ya perdía 1-3, así, tan rápido todo. El debut de la vigente campeona estaba muy cerca de ser un fracaso. Y no fue menos. Desde el banquillo las entradas de Pedro y Torres sólo aportaron velocidad, pero nada de peligro arriba. A Silva le anularon bien un gol por fuera de juego bastante claro. Louis Van Gaal se debía regodear desde la banda sabiendo la que estaba liando, ya que las opciones de que Holanda le metiese miedo hoy a España eran bastante bajas, seamos sinceros. Pero en eso consiste en fútbol... en sorpresas. Y hablando de sorpresas, llegaron los dos siguientes goles. La defensa no hacía aguas, hacía mares,´teniendo a Busquets solísimo en las ayudas a los mencionados centrales, que ayer estuvieron demasiado perdidos como para jugar un partido en la Copa del Mundo. Iker Casillas se sumó a la fiesta, y tras un control penoso a una cesión de Ramos, le regaló el balón a Van Persie y éste hizo el cuarto. Humillación. Minutos después Robben decidió eso mismo, humillar a España, ganándole una carrera de forma impresionante al central del Real Madrid, después dejar sentado por dos veces a Casillas y finalmente, superar la 'oposición' que efectuaron los centrales en la línea de gol.

Si bien habéis leído, no he mencionado a Xavi Hernández en toda la crónica, ni tampoco a Andrés Iniesta. Éste último se salvó más o menos de la quema de ayer, pero el primero... el centrocampista del Barcelona no es que lo hiciera mal, es que no hizo nada. Y ese es el problema. Si el cerebro de esta selección sigue siendo un hombre de 34 años que no aporta movilidad ni la genera, y ni siquiera roba un balón, mal vamos. Lo siento Xavier, eres ídolo pero los ciclos acaban. Creo que no hace falta decir nada más.

España se hunde en su inicio en Brasil inexplicablemente, y tiene muy difícil la clasificación a octavos. Pero como bien dijo Xavi en rueda de prensa (algo sí que hizo el hombre), hay que tomárselo como unos treintaidosavos, dieciseisavos, octavos... y así hasta Maracaná. Aunque por allí habrá que pasar antes, que Chile allí espera otra vendetta ante la Roja por excelencia.

España (Xabi Alonso) 1-5 Holanda (Van Persie x2, Robben x2, De Vrij)

Arena Fonte Nova, Salvador de Bahía

Chile 3-1 Australia

El grupo de España se cerró con el Chile-Australia, un partido mucho más trascendente de lo que pudiera parecer en algún momento. La derrota de España dejaba ya loco el grupo, y este partido podía ser decisivo para el devenir del grupo B.

El conjunto chileno se hizo con una victoria más apurada de lo que parecía y más abultada de lo que debió ser. Un 3-1 es un resultado justo, pero ambos pudieron hacer más. El partido se iniciaba con 15 minutos arrasadores de la selección que ejercía de local en el Arena Pantanal de Cuiabá, y no sólo por temas oficiales, sino por temas de afición. Las gradas eran chilenas totalmente, algo que motivó a los jugadores desde el inicio. Pero para motivación, la defensa de Australia. Niños de patio de colegio, ni en alevines se comete tanto descontrol en las líneas defensivas. El primero no tardó en llegar y fue del referente de esta selección, el niño maravilla Alexis Sánchez, que aprovechó un rechace de un centro al área para batir a Ryan en el minuto 12. Dos minutos después, Valdivia mandó a la escuadra el balón, culminando una gran jugada del combinado sudamericano. Quince minutos, dos goles y la que le podía caer a los 'socceroos'.

Pero fue un espejismo. Los dos goles fueron aislados y Australia despertó. Sin nada que perder y mucho que ganar, y basándose en las ganas de su medio campo, destacando el ímpetu de Oar, los australianos consiguieron que Chile no les superase con la claridad que al principio sí lo habían hecho. En el centro del campo chileno algo fallaba, y ése era Arturo Vidal, desaparecido en combate y con unas molestias que le impidieron brillar en el debut de su selección. El que sí brilló fue el incombustible Tim Cahill, consiguiendo su cuarto gol en los mundiales con un cabezazo inapelable que se coló en la escuadra de Bravo.

                                   

Australia demostró plantar cara y Chile que no es tan fiero como lo pintan. A pesar del peligro australiano en la segunda parte, que estuvo más igualada pero algo superior Chile tácticamente, los de Sampaoli se hicieron con la victoria consiguiendo un gol más por mediación de Beausejour, pero en el minuto 88. Hasta entonces el partido se había animado bastante y la igualdad predominaban. Hay que destacar un paradón de Claudio Bravo a tirazo de Bresciano desde el pico del área que salvó del empate a los chilenos.

Así, Chile se establece segunda del grupo B, con Holanda de líder por diferencia de goles y por detrás a Australia y España.

Chile (Alexis, Valdivia, Vargas) 3-1 Australia (Cahill)

Arena Pantanal, Cuiabá.

13 de Junio de 2014.

Crónicas realizadas por: Sergio Díaz Alonso (@SergioDiaz_20)

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