Ya estamos en cuartos. Nos toca, otra vez más, Francia. Los guiñoles. Zidane, 2006. Zidane, 2000. Platini, 1984. Demasiada rivalidad. Un partido que siempre supera lo futbolístico y se convierte en una batalla. Ésta vez la batalla fue fácil de librar.
España 2-0 Francia
Xabi Alonso cumplía cien partidos con la selección. Qué mejor forma de celebrarlo, que con una victoria. Más aún, comprando el billete que nos llevará a semifinales de la Euro. Todavía más, si es contra Francia, con todo lo que se ha dicho últimamente de nosotros por parte de unos muñecos de tela. Y lo mejor de todo es que lo celebró marcando los dos goles de La Roja, que ya se acerca bastante a cumplir un sueño, algo que nadie ha hecho antes.
España mejoró su imagen, en comparación con la que dio en el partido ante Croacia. Volvimos a ver a una España que se iba arriba, que no sólo tocaba en el medio campo y que no jugaba con guión, sin poder saltarse las normas. A pesar de ello, parece que en el banquillo ésta vez Don Vicente acertó de pleno.
Los franceses optaron por darle la pelota a España, sacando Laurent Blanc un planteamiento más defensivo, con Debuchy por la banda, delante del lateral. La baja de Mexes era sensible, pero Koscielny estaba ahí para lo que hiciera falta. Nuestros chicos empezaron a tocar, a tocar, a tener la bola. Pero, a diferencia de otros partidos, combinaron el toque con desmarques de ruptura, pases en largo y sobre todo, más riesgo en ataque y juego por bandas. Ésta vez Del Bosque optó por el falso nueve. Sacó a Cesc de titular, cosa que nos vino bien para llegar arriba con el mismo control del balón que tenemos en el medio campo. Arbeloa, más criticado que nunca, y Jordi Alba, siempre alabado por su perfecto torneo, se salieron por sus respectivas bandas. Siempre había uno solo. Por la banda del todavía valencianista llegó el primer gol. Después de un penalti bastante claro, reclamado de Fabregas y algún tiro que otro, Xabi Alonso alargó su leyenda metiendo un cabezazo picado en la portería de Lloris. El mencionado Jordi Alba se fue por la banda, se libró de Debuchy, que cayó en un intento de quitarle el balón, levantó la mirada y vio al tolosarra en el segundo palo. Cual llegador inglés de toda la vida, Alonso llegó como un tiro desde atrás y batió a Lloris.
La segunda parte comenzó con una España relajada, tranquila, con la posesión. Pero los movimientos de Blanc (sacar a Nasri y a Menez) surtieron efecto e hicieron sudar a la defensa española, bastante bien en este aspecto. Benzema no estaba en su sitio y tenía que hacer todo. Bajaba muy atrás para recibir la bola y construir, pero él no podía hacerlo solo. Ribery estuvo bastante ausente.
Los cambios españoles fueron certeros y precisos. Pedro (le quitamos el -ito) y Fernando Torres salieron para hincar un poco el diente a la escuadra francesa, que se empezaba a hacer con el mando del partido, algo bastante malo (lo digo por experiencia). Pedro está fresco, y eso se nota. Estuvo eléctrico todo el tiempo que estuvo sobre el terreno de juego con centros, desbordes, carreras y regates. Uno de esos regates propiciaron un penalti clarísimo cometido por Debuchy. El extremo canario se fue con una bicicleta espectacular de Rami y cayó, tocado claramente por el lateral francés. ¿Quién lo tiraría? Pues Xabi Alonso, especialista en estas ocasiones. No falló, y redondeó su excelsa noche con dos golitos. Además, así evitamos el uno cerismo, algo que no gustó a nadie en el Mundial de Sudáfrica y que no era bueno de ver, todo 1-0, 0-1, 0-1... Pues fueron dos.
Ya estamos en semifinales. Toma.
EURO 2012. Jornada 15.
Cuartos de Final. 23 de Junio de 2012.
Escrito por: Sergio Díaz Alonso.
Twitter: @SergioDiaz_20.
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