Javier Pastore, estrella del PSG.Dos días después la derrota del Paris Saint-Germain en la Copa de Francia frente al Dijon, y pasados ya tres meses desde que el equipo rompiera el mercado internacional con el fichaje de Javier Pastore por 45 millones de euros, es hora de repasar cómo le va al conjunto del jeque Nasser al-Khelaifi. Es bien sabido que los fichajes a golpe de talonario no garantizan el éxito. Pero el Paris Saint Germain está en alza, y existen una serie de condiciones que pueden propiciar un éxito más repentino que el del Manchester City, su ejemplo a seguir.
Líder en la liga francesa y segundo en el grupo F de la Europa League –encabezado por el Athletic-, afronta este año el complicado reto de conseguir resultados cuanto antes mejor, habiendo gastado unos 86 millones en fichajes. De partida, se tomó una decisión distinta a la que se suele en proyectos de este calibre: dar confianza al entrenador que había conseguido la cuarta plaza en liga el anterior año, Antoine Kombouaré, que también defendió a mediados de los 90 los colores del equipo en el campo. Buen conocedor de la cantera y de la forma de trabajar de la casa, ha conseguido integrar a los fichajes, sin dejar de subir al primer equipo a jóvenes talentos de los equipos inferiores, como Bahebeck.
El equipo comenzó y sigue bien, sustentado sobre una defensa estable, un buen arquero y, sobre todo, la calidad de Javier Pastore. El mediapunta argentino va literalmente sobrado en la liga francesa. Sus cinco goles en nueve partidos así lo indican. Tras haber pugnado frente a las duras defensas italianas durante dos temporadas, las francesas, por lo general de menor nivel y peor organizadas, le permiten desarrollar su talento ampliamente. Regate, pase al primer toque, tiro lejano, llegada desde atrás…Pastore controla todas las facetas del juego ofensivo. Incluso es poderoso en el juego aéreo, con sus 187 centímetros. Nombrado mejor joven de la Serie A en 2010, en las diez jornadas disputadas en el campeonato francés ya ha dado varias muestras de su calidad.
Tras haber repatriado a jugadores que salieron como estrellas de la liga francesa (Ménez) y fichar a lo mejor del mercado interior (Matuidi, Gameiro), es difícil que el PSG no se haga con el título de campeón. Sus problemas están fuera de esta competición. En Europa League no están desarrollando un juego atractivo y no consiguen imponerse en su grupo. Quedar segundo en el F supondría enfrentarse probablemente a algún coco y esto por supuesto no interesa. Para solucionarlo, quizá el técnico debería cambiar su sistema de rotaciones, ya que los suplentes no rinden como los titulares.
O quizá el equipo debería empezar a moverse en el mercado. Por supuesto, existen muchos rumores sobre posibles fichajes. A saber, Tévez, Hazard, Beckham, Kolo Touré o Marek Hamsik. Y aunque los nombres son de calidad, sus contrataciones significarían seguir una política como la del Manchester City, una política poco adecuada probablemente. Porque el Paris Saint-Germain no necesita acuciantemente ni delanteros, ni extremos, ni centrales. Sus laterales son su gran punto débil. Y ya se ha comprobado en el equipo inglés que tener plantillas largas llenas de estrellas es mucho más viable en videojuegos que en el mundo real. Y en la mediapunta parisina solo hay hueco para Pastore.
@andionrubia
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