La estancia del Deportivo de La Coruña en este primer tramo de la Liga Adelante no está siendo nada satisfactoria para el aficionado coruñés. Las expectativas eran altísimas, plantilla incluso con más nivel que la de temporadas atrás en Primera, declaraciones altisonantes "Somos el Barça de la categoría" y demás convirtieron el clima en tensión, con las primeras derrotas del conjunto gallego y la mala imagen en algunos encuentros ( 4-0 Alcorcón)
La forma de jugar que quiere implantar Jose Luis Oltra está bien clara, presión a la salida de balón del equipo contrario, robo de balón rápido y contraataque corto. Si comienza jugando el Deportivo, la premisa es balón al suelo y ataque combinativo. Nada de especulación, algo que agradece el espectador pero que provoca muchos desajustes en una defensa que hasta el momento se muestra muy débil, con jugadores como Ayoze o Aythami fuera de su nivel habitual y con habituales lesionados como Manuel Pablo o Zé Castro. El atrevimiento del míster es tal, que en partidos en los que se iba por detrás en el marcador, colocó una defensa de 3 con Valerón de mediocentro y acumulando hombres ofensivos, algo increíble para un equipo que venía de un juego insulso y eminentemente defensivo como el de Miguel Angel Lotina.
Por el momento, lo que podemos apreciar, es que Riazor se está convirtiendo en un fortín, algo imprescindible para poder aspirar al ascenso a Liga BBVA, pero el verdadero handicap de los de Oltra es fuera de casa, donde una alarmante falta de tensión y ambición hace que, salvo excepciones, el equipo tire 45 minutos y en los siguientes tenga que remar contra el resultado.
El juego tampoco acaba de ser brillante, por fases el Deportivo combina bien y juega vistoso pero se pierde sobre todo, en la pareja de mediocentros, donde Jesús Vázquez no estaba al nivel que se esperaba en su fichaje. El canterano Juan Domínguez ha ocupadosu sitio y está aprovechando su oportunidad rindiendo a un gran nivel, sobre todo siendo más ofensivo y elaborando fútbol con el canario Juan Carlos Valerón, indiscutible líder del equipo.
La última victoria ante el Almería, por como se produjo ha traído tranquilidad al seno del Deportivismo, algo nervioso por la derrota ante el Elche, pero la verdadera prueba de fuego será en el Nuevo José Zorrilla ante el Valladolid, ante un rival directo, ahí veremos si el Deportivo, ha encontrado ya su camino.
Adrián Gómez
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